El 21 de julio de 2025, aproximadamente a las 20:45 horas, fue localizado el cuerpo sin vida de una niña de 11 años en un terreno baldío de la compañía Isla Saká, distrito de Fulgencio Yegros, Caazapá. La menor había desaparecido alrededor de las 15:00 horas, lo que activó la alerta entre vecinos y autoridades.
Inicio de la investigación
Tras la denuncia presentada por la madre en la comisaría local, agentes del Grupo Especial de Operaciones (GEO) y personal del Ministerio Público iniciaron la búsqueda, hallando el cuerpo a unos 200 metros de la vivienda de la víctima. El sitio fue aislado para el levantamiento de pruebas.
Resultados preliminares de la autopsia
La médica forense confirmó que la causa de muerte fue asfixia mecánica por estrangulamiento. El pantalón de la menor habría sido utilizado como instrumento de ahorcamiento. Aunque se descartaron lesiones genitales, se extrajeron fluidos para análisis que buscan confirmar o descartar otras formas de agresión.Perfil del sospechoso
Marcelo Jiménez Duarte, de 24 años, fue detenido por su presunta implicación en el crimen. El sospechoso posee antecedentes por tentativa de abuso contra la misma víctima en 2022, cuando tenía 8 años. En esa ocasión, fue encarcelado y, según familiares, realizó amenazas de venganza mientras estaba privado de libertad. Recuperó su libertad condicional el 30 de abril de 2025.
Testimonios clave
La madre de la menor, trabajadora doméstica y madre de cuatro hijos, declaró que el día del crimen regresó del trabajo y al no hallar a su hija, recurrió a familiares, vecinos y finalmente a las autoridades. También expresó que el sospechoso habría estado rondando la zona en días anteriores.
Por su parte, el comisario Marcos Velázquez, jefe de investigaciones de Caazapá, ratificó que el detenido había sido denunciado previamente por intento de abuso y que ya en ese momento se habían emitido advertencias sobre posibles represalias futuras.
Estado actual del caso
El fiscal Carlos Germán Ramírez informó que aún se encuentran en la etapa inicial de la investigación. Hasta el momento, la principal evidencia proviene de testimonios y de la escena del crimen. El sospechoso permanece recluido en la Comisaría de Caazapá, y se espera que las pruebas forenses ayuden a esclarecer los hechos.