El presidente de la República, Santiago Peña, mantuvo este lunes una reunión con la ministra de Salud, María Teresa Barán, y le solicitó “triplicar los esfuerzos y mostrar resultados a corto plazo”. La exigencia del mandatario se da en un contexto de creciente presión por parte de legisladores del oficialismo, especialmente del sector cartista, que vienen exigiendo cambios dentro del Gabinete.
Salud en la mira del Ejecutivo
Durante el encuentro en Palacio de Gobierno, el vocero del Ejecutivo, Guillermo Grance, señaló que el presidente fue enfático en la necesidad de acelerar mejoras visibles en el sistema de salud pública. “La salud no puede esperar”, afirmó Grance, transmitiendo el mensaje de Peña.
Por su parte, la ministra Barán informó que, además de proyectos de nuevos hospitales, están priorizando el mantenimiento de 10 hospitales distritales y uno regional. También mencionó que se está trabajando en la optimización de distintas áreas para mejorar la calidad del servicio a nivel nacional.
Avances en terapias, neonatales y ambulancias
El viceministro de Salud, Saúl Recalde, indicó que se está rehabilitando el 100% de las unidades de terapia intensiva para adultos, y adelantó que el próximo 14 de julio se inaugurarán los servicios neonatales del Hospital Nacional de Itauguá y del Hospital de Barrio Obrero.
También anunció el fortalecimiento del Servicio de Emergencias Médicas Extrahospitalarias (SEME), con el reemplazo total de ambulancias en la sede central y la dotación de 206 unidades nuevas (básicas y avanzadas) a nivel país. Asimismo, reveló que se licitó un nuevo sistema de mantenimiento que dará soporte a 285 vehículos del parque automotor del Ministerio de Salud.
Ministros en la cuerda floja
La reunión con el equipo de Salud se realizó pocos días después del informe presidencial, donde sectores del Congreso –incluido el oficialismo cartista– sugirieron cambios urgentes en el Gabinete. La ministra Barán es una de las figuras más cuestionadas, junto con Gustavo Villate (Mitic), por el reciente hackeo masivo a plataformas del Estado.
También son blanco de críticas la ministra de Obras Públicas, Claudia Centurión, tras su polémico comentario sobre el precio de la chipa en medio del conflicto por el aumento de peajes; y el ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, quien fue duramente cuestionado por pedir a los ciudadanos “ir a otras estaciones de servicio” en lugar de enfrentar las subas especulativas del combustible.
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